Los precios al consumidor aumentaron un 0,59% desestacionalizado en junio con respecto al mes anterior, por debajo del aumento del 1,07% de mayo. La desaceleración se debió principalmente a un crecimiento más débil en los precios de la vivienda. Además, se relajó la presión de los precios del transporte y la recreación y la cultura.
A pesar de la moderación intermensual, la inflación subió al 8,1% en junio desde el 7,7% de mayo. El resultado de junio marcó la tasa de inflación más alta desde que comenzaron nuestros registros actuales. Mientras tanto, la tendencia apuntaba al alza, con una inflación anual promedio que alcanzó 5,6% en junio (mayo: 5,1%). Finalmente, la inflación subyacente aumentó hasta el 6,2% en junio, desde el 6,1% de mayo.
Los analistas de FocusEconomics esperan que la inflación promedie 6,2% en 2022, 0,6 puntos porcentuales más que el pronóstico del mes pasado. En 2023, nuestro panel prevé una inflación promedio del 3,0 %.